lunes, 20 de febrero de 2012

Meteorología experimental.

Las cruces que yo te pinté
en las tardes más oscuras del año.
Todos los corazones que dibujé
en la arena de esas playas carmesí.

Las espadas con las que atravesé
el latir de nuestras noches peor dormidas.
El frío acero creó, por sorpresa,
escalofríos, más bien espasmos.

Nos dormimos sobre los Dioses.
Los corazones nos gritaban, enrojecidos.
Se quejan de las nubes, de su peso.
Se quejan de los vientos del deseo.

Las marionetas tiran de las cuerdas,
pierden los estribos. Comienza la locura.

El Sol explota, destroza.

domingo, 19 de febrero de 2012

Más cúmulos.

¿Cómo decirte que no?
Que el amor no es lo que piensas.

El amor es atravesar las sombras,
no necesitar romper el silencio.
Dejar que el hielo se derrita, lentamente,
sobre tu tripa, desnuda, curva.

Sentir la lluvia sobre nuestros cuerpos,
caminar desnudos por la playa.
Frío reconfortante. Huimos del calor.

Paraguas contra tormentas solares,
vivir bajo cascadas hechas de lágrimas
derramadas por razones de algodón.
Rosa, azul, verde, amarillo, magenta...

El cielo extiende sus brazos para abrazarte,
no huyes, te acomodas en sus nubes.

martes, 14 de febrero de 2012

Nubes, porque estás ciego.

Llueve sobre mojado,
el agua juega con las calles,
crean canciones indescifrables.

Tú caminas con rapidez
rompiendo los ritmos del azar.

El cristal se rompe,
los bebés lloran,
las paredes tiemblan,
tú pestañeas.

Me preguntas qué hago,
—Huir—, te digo.
Me respondes que a dónde,
te digo que no lo sé.
Me susurras que todo estará bien.

Pierdo los papeles que
se convierten en pájaros
que explotan convirtiéndose
en nubes de melaza.

No veo.

Las nubes llegaron en la noche,
prometieron irse al amanecer
pero ahí siguen, estorbando.

El frío prometió no venir a la fiesta
y ahí sigue, tacaño, no da ni nieve.
El polvo de estrellas se derrite,
desaparece, como tú.

Te alcanzo y ya no estás,
ni te molestas en dejar de sonreír
y, sin saberlo, me seduces.
Estoy cada día más loco —Por ti—.

No puedo ver, la niebla
es cada día más espesa.
No puedo ver por dónde piso,
Tengo miedo y quiero volver a casa.

Mentiras y yo.

No puedo vivir una mentira
hecha de sueños de regaliz
que se retuercen y me ahogan,
que no me dejan respirar.

No puedo vivir una mentira
aunque sea lo que quiera.

La vida se me amarga,
más que la vida, el día a día.
Cuento mis pasos camino a casa
y nunca paso de 10.
Cuento ovejas hasta dormirme,
llevo como cien y sigo en pie.

Que alguien me diga algo,
una orden o recomendación
de como despertar de esta broma.
Volver contigo a Roma
o con ella a París.

Ya no quiero vivir esta mentira,
quiero saltar y salir de la foto
que contiene nuestras almas
y no nos deja ni latir ni vibrar.

jueves, 9 de febrero de 2012

Recuerdos.

Recuerdos del pasado florecen en mi mente,
mi alma vomita, de forma educada,
flores del verano del 2003.

Nombres que desaparecieron hace años
vienen hoy a mí, lágrimas con sabor a nostalgia,
salada nostalgia, dulce deseo de reencuentro,
de jugar en el campo con palos,
de "moratones" en las espinillas,
de gritos al oriente, de escapadas al más allá.

Quedan hoy marcados para siempre,
de nuevo, flashes de risas incontrolables,
de aquellas cenas con bromas incomprensibles,
pestañeos que durarán hasta nuestra muerte.
El sentimiento de amistad que ya no duerme,
que despertó para hacernos reír un día más,
para hacernos recordar que nunca se acabó
lo que nunca quisimos que se terminara.

El pasado de un poeta que no era poeta,
de un músico que no era músico,
de tú, sin novia -aunque ahora tienes-,
de mí, sin novia -y sigo sin tenerla-,
llorando por aquellas chicas,
B, M, B2, M2 -No había nombres-
Los códigos que sólo tú y yo conocíamos,
que sólo tú y yo conocemos,
hoy se pierden entre el granizo y la nieve,
como las pisadas que dábamos al saltar sombras,
sombras hoy casi invisibles, por el paso de los años,
por la falta del Sol que nos alumbraba a los dos.

Hoy, como decía, recuerdo el pasado,
hoy me río contigo otra vez, hermano.

Para Mario.

lunes, 6 de febrero de 2012

Miel y limón. La piel y el timón.

El cielo es sensual y se tapa,
a medias, se deja entrever.
Las estrellas son pecas en su espalda,
iluminan, hacen rutas.

Barcos de papel vuelan desde tus ojos,
no llegarán a puerto seguro. Explotarán.
Mariposas de celofán en la Torre Eiffel
provocarán tormentas de zumo de manzana.

Estallarán cristales, se clavarán en nuestra piel,
se mezclará nuestra sangre, nacerán niños,
morirán ancianos. Perderás la virginidad,
encontrarás el amor.

Sonará una triste melodía, llorarás. -Espero que llores-.
caerán flores rojas, blancas y azules,
caerán flores verdes, blancas y rojas,
caerán flores rojas, amarillas y moradas,
Caerán flores en todo el mundo, no solo colores.

Gracioso.

Gracioso, como todo está vacío.
Gracioso, ver como se llena en horas puntas.
Gracioso, ver marginados ayudando.
Gracioso, gente colgada de su teléfono.
Gracioso, personas riendose a carcajada pura.
Gracioso, gente sería, demasiado seria.
Gracioso, poemas que se te olvidan.
Gracioso, la lluvia de lado.
Gracioso.

jueves, 2 de febrero de 2012

English III

Maybe the streets in here
are just fallen dreams to own
in this unperfect situation
where wishes don't run.

If the classic dramma
begins to starve
maybe the youngest children
would start to shout.

There will be no place on Earth
to take care of hopes,
to take care of us.

This is a strange world
where life doesn't inspire love
and love doesn't mean "God".

miércoles, 1 de febrero de 2012

Qué gracia.

Qué gracia me hacen tu sonrisa
y tus ganas de volar.

El viento te pilló de improviso
con las alas descuidadas,
bordadas con hilos de azafrán.

El tiempo ya no vuela, se queda estancado
y, en eternos segundos,
morimos.

Las plumas ya no escriben,
están de huelga -o eso dicen-.
Los sueños se han parado,
y las agujas, sucias de barro,
piden ser limpiadas, con cuidado,
¡no las rompas!
No quieras quedar atado a
un momento que no es tuyo,
a una realidad obtusa,
a una maja sin blusa.

¡Qué gracia me hace tu sonrisa!
¿Y esas ganas de vomitar?

Antes de levantarte dos
palmos sobre el suelo
aprende a volar.

Qué gracia me hacen tu sonrisa
y tus alas al soñar.